¿Porqué las palabras cuestan tanto?
¿Porqué amarrar su vuelo y aprisionar sus alas a cadenas de honor?
Hastían las palabras gastadas ... vacías ... incoherentes.
Exijamonos coherencia ... ética ...
alcaremos nuestros criterios.
Una vez decidida la opción ... ¿cuál es el problema?
A costa de mí y de tí ...
¿Crees qye es sueño?
Pues no despiertes la placidez del caminante ... respeto al sueño de los demás ...
dejar caminar y tropezar ... si es necesario ...
Molestan las piedras pero el proceso es nuestro.
Duelen las heridas pero la cura está en nuestras manos.
Dejanos dormir con la alegría de volar y construir,
de ser más en cada mano levantada,
de crecer en cada ruta andada.
Sin despertar en la frutración de la agenda olvidada
o en la pasividad de la paloma que añora la jaula.
Permíteme el derecho de dormir
permíteme el derecho de andar
déjame crecer.
(Marzo 23, 1992)
Periodista de profesión. Trabajadora Social por convicción. Facilitadora en procesos formativos. Declamadora. Amante de la vida, la sonrisa y el vivir cada día con la intensidad de estar disfrutando el último de mis días. Pienso que el cambio del estatus quo es posible y que las y los empobrecidos merecemos un mundo de respeto, equidad y justicia social.
viernes, 29 de febrero de 2008
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